sábado, 6 de julio de 2013

La prohibición


Hoag le informa a Randall y Cynthia que ha descubierto en nuestro universo algunos defectos menores: serán rápidamente reparados en las horas siguientes. Ellos ni siquiera advertirán el cambio siempre y cuando al volver en su auto a Nueva York nunca bajen la ventanilla, en ninguna circunstancia y a pesar de lo que vean. Hoag parte; aún exitados Randall y Cynthia inician el regreso al hogar.
Mientras respetan la prohibición no sufren ningún contratiempo. Pero a cierta altura del camino presencian un accidente, un niño atropellado por un auto. Al principio la pareja conserva la calma y no se detiene, pero cuando encuentran un patrullero prevalece su sentido del deber, y se acercan para informarle lo que han visto. Randall le pide a Cynthia que baje un poco la ventanilla:
Ella obedeció, y en seguida aspira profundamente, tragándose un grito. No gritó, pero quiso hacerlo.
Fuera de la ventanilla abierta no había sol, ni policía, ni niños, nada. Nada salvo una niebla gris e informe, latiendo lentamente como si tuviera una vida rudimentaria. A través de ella no podían ver nada de la ciudad, no porque la niebla fuera demasiado densa, sino porque estaba…. vacía. De ella no se desprendía ningún sonido, no se veía en ella ningún movimiento.
La niebla se mezcló con el marco de la ventanilla y comenzó a penetrar en el interior del auto. Randall gritó: ¨!Cierra la ventanilla!¨. Ella intentó hacerlo, pero sintió las manos enervadas, entonces el propio Randall se tendió e hizo girar la manivela, subiendo la ventanilla a su sitio.
Reapareció la escena bañada por el sol, a través del vidrio vieron al patrullero, el juego tumultuoso, la acera y, más allá, la ciudad. Cynthia le puso una mano en el brazo. ¨Vayámonos, Tedy!¨ ¨Aguarda un minuto¨, dijo él tensamente, y se volvió hacia la ventanilla que tenía detrás. La bajó con mucha cautela, quedó apenas una grieta, menos de un centímetro.
Fue suficiente. El flujo gris informe apareció de nuevo allí, a través del vidrio se veía el tránsito de la ciudad y la calle iluminada por el sol, a través de la apertura… nada.

Fragmento textual extraído del libro ¨Mirando al sesgo¨ de Slavoj Zizek sobre una novela de ciencia ficción de Robert Heinlein titulada La desagradable profesión de Jonathan Hoag, Ed. Paidós, 1991, p.32

1 comentario:

  1. Hola Caléndula, soy Vicent Adsuara i Rollan, ya hacía tiempo que no publicabas y me ha encantado, ahora que las personas han dejado de lado un poco los blogs, que escribas, siempre seremos los que escuchamos detrás de la frase, los que imaginamos y los que estamos en ese coche y bajamos valientemente la ventanilla los que nos acercamos valientemente y jugándonos encontrarnos con algún lobo en el camino, yo no soy un lobo, quizá un soñador algo Quijote, pero te digo que me encanta soñar que domino esa realidad que veo a través del cristal de mi coche, que no tengo, conduce mi mujer y lo hemos perdido hace un par de meses por cuestiones económicas, ya ves la vieja Europa comienza a luteranizarse y a no ver la voluntad como eje para cambiar el mundo, bueno, pues me gusta ese poder soñar y poder al menos escribir y hablar, aunque ya hay quien piensa o que soy un loco o demasiado impertinente, lo cierto es que entre que los blogs ya son, en este mundo de las carreras fórmula uno, algo del jurásico, y mi no callarme ni bajo el agua parece que empiezo a no tener sitio, a no ser que hombres y mujeres como tú y como Zizek nos den un lugar, que habremos de ganárnoslo nosotros, cómo no, con la valentía de hacernos oír y no callarnos por miedo ¿te acuerdas del poema de Walt Withman que te pasé? pues si no te acuerdas te recordaré que hablaba sobre el miedo a no hablar, a dejar hacer a esos fríos que querrían el mundo como un gran cuartel para satisfacer su ser, que no es otro que su estar en el discurso del amo o del capitalista dejándonos a nosotros los del histérico sin nuestra máxima, el goce por el saber.

    En fin te dejo ya, y aunque me veas un poco derrotado estoy conservando aún mi trabajo ¿sabes que hay grandes zonas de España donde el paro llega al 40 %? Desde aquí se ve la realidad como un ganado de ovejas a las que le falta el perro guardián y muchos lobos en las inmediaciones, y los perros guardianes tienen ya cara de lobos también ¿no sé si me entiendes? pero Francia tiene la bomba atómica y Alemania, lo bueno es que a ellos aún les funciona el salario, en fin que le vamos a hacer, nos han desmontado luteranamente nuestro orgullo por la praxis, por la voluntad y ya sólo nos queda a esta vieja Europa ver el final sentaditos sobre nuestros sofás en un vídeo de último modelo que suponga la mitad de nuestro ya menguado sueldo.

    Bien, no todo es tan malo, de hecho vivimos mejor que en épocas pasadas, pero es que da una cierta molestia hablar de optimismo, bueno, un abrazo y decirte que me encantaría que pasases por mi blog para recobrar nuestra vieja amistad, que ha ido quedándose un poco en la memoria, pero de veras que te aprecio, y no hay día o al menos semana en que no piense en nuestras conversaciones o los viejos tiempos, y hablamos de un año, de nuestras publicaciones.

    Un abrazo a ti y a la familia desde la vieja València deseándote y deseándoos que con la ayuda de la buena literatura de la que has puesto un ejemplo, Zizek, la cultura y la bondad el mundo pueda dejarnos un poco vivir nuestra maravilla de vida, lo que supone vivir, con todo lo bueno y lo malo.

    Un beso y un abrazo de amigo de la red

    Vicent Adsuara i Rollan

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